
El entrenador Martín Villagrán regresó al Socios Fundadores con Olímpico de La Banda y fue ovacionado por el público de Gimnasia y Esgrima, que lo homenajeó por sus ocho temporadas al frente del equipo.
El estadio Socios Fundadores de Comodoro Rivadavia vivió una jornada cargada de emoción. El regreso de Martín Villagrán, esta vez al frente de su nuevo equipo, Olímpico de La Banda, dejó una huella imborrable en el público de Gimnasia y Esgrima. Fue club que lo tuvo como entrenador durante ocho temporadas en la Liga Nación de Básquet y le brindó un sentido homenaje este fin de semana.
El encuentro, a pesar de la derrota del local por 67 a 70 este viernes, tuvo un componente emotivo que superó lo deportivo. Antes del salto inicial, la dirigencia del club comodorense realizó un reconocimiento formal al entrenador, un gesto que conmovió profundamente al protagonista de la noche.
“Sumamente agradecido por tanta demostración de afecto”
Tras el partido, y con la alegría de la victoria a cuestas, Martín Villagrán compartió sus sensaciones en diálogo exclusivo con Crónica. Sobre esta jornada, siendo “la noche especial, la primera en el Socios Fundadores con otra camiseta”, el DT no dudó en expresar la magnitud de lo vivido. “La verdad que es una locura, sumamente agradecido por tanta demostración de afecto, del cariño. La verdad que es increíble“, confesó, emocionado.
El entrenador destacó la dificultad de la cancha que tan bien conoce y señaló que es durísima. “No gana cualquiera acá”, expresó. Pese a la trascendencia del momento, el foco estaba en la necesidad de su equipo: “Nosotros necesitábamos los puntos, estamos en formación. El objetivo era traer una victoria de la gira y lo conseguimos“.
El factor Socios Fundadores: “Es un equipo que hace fuerte la localía”
Villagrán se refirió a la dureza del mítico estadio desde su nueva perspectiva, rememorando su experiencia como local. “Esta cancha es durísima. Lo viví en carne propia, siendo entrenador de Gimnasia, es la cancha más difícil en la que he jugado“, sentenció. La prueba de ello, incluso con su equipo arriba en el marcador, fue la reacción local: “Fíjate que hoy estábamos 14 puntos arriba y volvieron. Estábamos 10 puntos arriba y volvieron, y al final tuvieron la última bola para matarnos. La verdad que estoy muy contento”, analizó sobre el infartante cierre. La victoria, además, fue un hito en la ruta: “Es muy difícil salir de la ruta y ganar, y es mérito el esfuerzo aquí”.
La emoción que superó el foco
Ante la consulta de Crónica sobre la ovación del público coreando su nombre y el cúmulo de emociones que le generó, Villagrán comentó: “Yo la verdad que no puedo… Trato de ponerme en foco, pero es muy difícil. Muy, muy difícil, porque estar con toda tu familia, con el público, la demostración de cariño es inmensa y bueno, muy agradecido“, compartió el DT, luchando por mantenerse concentrado entre el recuerdo y la actualidad.
En lo estrictamente deportivo, el técnico atribuyó la victoria a un aspecto clave: la defensa. “El objetivo era menos de 70 puntos, lo dejamos menos de 70 puntos y ganamos todo“. Una muestra clara de la identidad que busca imprimirle a su nuevo equipo.
“Gracias eternas”
Al cierre, el exentrenador de Gimnasia no quiso despedirse sin volver a dirigirse al público y a la institución que lo formó y lo tuvo al frente durante tantos años. “Gracias a toda la hinchada de Gimnasia, a la dirigencia, por el semejante gesto. Gracias eternas, porque la verdad es que está en el corazón“, concluyó Martín Villagrán, sellando una noche que quedará grabada en la memoria del básquet comodorense.






